La exmánager del rapero venezolano Canserbero confiesa que lo mató

Unas horas después de que se conociera la confesión de Natalia Améstica, quien aseguró haber asesinado en 2015 al rapero Canserbero, y las declaraciones del fiscal Tarek William Saab, Claudia Améstica, sobrina de Natalia Améstica e hija de Guillermo Améstica, se pronunció al respecto. Su mensaje fue contundente: rechazo a los señalamientos de Saab.

“Me dirijo ante este medio para rechazar contundentemente las declaraciones dadas por el fiscal el día de hoy. Señor fiscal, usted sabe que esas declaraciones que usted sacó, tanto de mi tía como de mi papá, son falsas. Usted lo sabe”, dijo Claudia Améstica, a través de un video.

“Nos quitó los abogados. Mis abogados no han podido entrar y tener comunicación ni una sola vez desde ellos llegaron al Conas (Comando Anti Extorsión y Secuestro). Más de nueve días aislados, sin poder saber si estaban bien, si habían sido torturados, si estaban comiendo… nada. Entonces, ¿usted espera que yo crea eso”, añade en el video.

Hoy, en los videos que sacó a la luz el fiscal Saab, Natalia Améstica confesó el doble asesinato: el de su esposo Carlos Molna y el del Canserbero. En el homicidio también habría participado Guillermo Améstica, su hermano, quien la ayudó a transformar la escena de crimen, haciendo parecer la muerte del rapero como un suicidio, tesis que se mantuvo durante varios años y que solo fue derrumbada el 15 de diciembre.

Aquel día, tras la exhumación del cuerpo del artista, luego de que la fiscalía de Venezuela reabriera el caso de la muerte de Canserbero en noviembre, se descartó la versión del suicidio, en la que no solo se sostenía que el cantante se había tirado de un décimo piso de un apartamento en Maracay, sino que, antes de hacerlo, había peleado con Carlos Molnar y, por eso, lo había asesinado.

Pero la realidad fue otra, como aseveró la misma Natalia Améstica: “En ese momento, llega Carlos Molna, mi pareja, para conversar, pero cuando me di cuenta de que ya estaba somnoliento, lo ataqué con tres puñaladas: una por el cuello, otra por la espalda y otra por el brazo. Cuando salgo de ahí, me coincido con Tirone (Canserbero), quien estaba ya dormido por efectos de las pastillas y fue cuando le causé dos puñaladas en su costado”.