Erika Ávila, quien actúa como portavoz de los maestros al frente de la toma, reafirmó que la ocupación es indefinida y señaló: “queremos una mesa de diálogo” para que nuestras demandas sean escuchadas.

Ávila reconoció que existen algunos acercamientos entre las partes en conflicto, y expresó su esperanza de que se logre un entendimiento. También hizo un llamado a los diputados de todas las bancadas para que atiendan sus solicitudes.

El dirigente subrayó que los maestros involucrados en la toma representan al “pueblo, pueblo”, y adelantó que más docentes de diferentes departamentos del país se sumarán a la ocupación.

Ávila insistió en que los maestros se oponen a las reformas propuestas para la ley del INPREMA, calificándolas de perjudiciales y violatorias de derechos adquiridos por el gremio.

Los docentes exigen que los 128 diputados del Congreso Nacional se abstengan de avanzar con el proyecto de ley impulsado por la Secretaría de Educación en conjunto con el diputado Edgardo Castaña, quien preside la Comisión de Educación.

La ocupación no tiene un plazo definido, y los maestros realizan relevos para mantener la presión sobre las autoridades. Se anticipa que más docentes se unirán a las manifestaciones en los días siguientes.

Como resultado de esta situación, están suspendidos los procesos de préstamos personales, la actualización de datos, y el pago de planillas complementarias para jubilados, así como el desembolso de la sexta renta.

El miércoles de esta misma semana, los docentes reiteraron su determinación de mantener la movilización hasta que sus demandas sean atendidas, mientras sus compañeros coreaban consignas en apoyo a la causa.