La noche del miércoles, un intento de fuga y motín en la cárcel de Támara dejó como saldo dos reclusos muertos y tres heridos.
El portavoz de las Fuerzas Armadas y Centros Penales, capitán José Coello, confirmó el incidente, detallando que ocurrió en el módulo Procesados 2, donde 72 internos intentaron escapar.
Según Coello, las autoridades activaron los protocolos de seguridad del Instituto Nacional Penitenciario y la Policía Militar del Orden Público para contener la situación.
“Se desplegaron acciones inmediatas para evitar la fuga y controlar el motín”, explicó.
Durante el enfrentamiento, dos privados de libertad, Carlos Andrés Soler y José Alejandro Cruz, resultaron gravemente heridos y fueron trasladados a un centro hospitalario, donde lamentablemente fallecieron.
Además, otros tres reclusos sufrieron lesiones y ya reciben atención médica.
En las primeras horas del jueves, se realizaron requisas coordinadas con la Policía Militar para garantizar la seguridad dentro del penal.
Aunque inicialmente circuló el rumor de un incendio y la muerte de una mujer privada de libertad, Coello desmintió ambos hechos.
“Lo que ocurrió fue un amotinamiento con la intención de fugarse. Los internos intentaron superar los anillos de seguridad y, en el proceso, las fuerzas de seguridad dispararon advertencias que resultaron en algunos heridos”, señaló el capitán Coello.
Añadió que las requisas continúan debido a la posible presencia de armas en el penal.
Este incidente pone de relieve nuevamente los graves problemas de seguridad en los centros penitenciarios de Honduras, donde situaciones violentas como esta han cobrado muchas vidas en los últimos años.
Las autoridades aún investigan si los reclusos estaban armados, mientras se busca esclarecer completamente los detalles del violento motín.
