El Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), ha mostrado un informe en el cual detalla las razones por las cuales el Congreso Nacional de Honduras es el país peor evaluado de la región según el Índice Latinoamericano de Transparencia Legislativa (o ILTL) debido a las irregularidades que se han gestado desde este poder del Estado.
A través de un hilo de la red social “X”, destacan las razones que hacen de este Congreso Nacional uno de los peores y es debido a la mala gestión del presidente Luis Redondo quien no ha sabido llevar dicho congreso.
Entre las acciones irregulares de este Congreso, se encuentra que de 13 días que se deben sesionar este mes, las y los diputados del Congreso Nacional, hasta la fecha sólo han tenido tres, incumpliendo la obligación de debatir sobre temas importantes para el país.
Asimismo, destacan que de las tres convocatorias que ha girado la Junta Directiva en este mes, no han publicado una agenda que permita a la población conocer los temas que tratarán en en el pleno, dejando en incertidumbre a los propios legisladores.
Las tres sesiones que han desarrollado, han iniciado de manera tardía, sumando un total de 5 horas 19 minutos de retraso. Cabe resaltar que en un intento de sesión, la misma fue suspendida a los diez minutos de haber comenzado.
De 128 diputados que deben asistir a las sesiones legislativas, no se ha logrado la presencia total de los congresistas en ninguna de ellas. Además, solo se publica una imagen del quórum sin definir la cantidad de propietarios y suplentes.
Las y los diputados que no asisten a las sesiones del Congreso Nacional, mensualmente reciben el pago de viáticos, mismos que no son liquidados públicamente.
La Oficina de Transparencia, que se ubica en los bajos del Congreso Nacional, permanece cerrada. Cada petición de información -que es un derecho que tiene la población- debe ser autorizada por el presidente del Congreso Nacional, según órdenes del personal de seguridad.
El Poder Legislativo recibió una calificación de 23.59% en el Índice Latinoamericano de Transparencia Legislativa (ILTL) reflejando la opacidad y la falta de apertura a la veeduría ciudadana.