El presidente de Corea del Sur da un golpe de estado y acusa a la oposición de colaborar con Pyongyang
El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, anuncia la proclamación de la ly marcial.
Por primera vez en 44 años se ha declarado la ley marcial en Corea del Sur. Tras meses de bloqueo por sus discrepancias con el Parlamento, el presidente, Yoon Suk Yeol, ha delcarado el martes la «ley marcial de emergencia» tras acusar a la oposición de simpatizar con Corea del Norte y paralizar el gobierno.
«Nuestra Asamblea Nacional se ha convertido en un refugio para delincuentes, una guarida de la dictadura legislativa que pretende paralizar los sistemas judicial y administrativo y anular nuestro orden democrático liberal», ha dicho Yoon.
En una comparecencia televisada, el presidente ha prometido «erradicar las fuerzas pro-norcoreanas y proteger el orden democrático constitucional». Lo curioso es que para protegerlo lo dinamita.
El general del ejército Park An-soo, nombrado comandante de la ley marcial, ha dicho que quedan prohibidas «todas las actividades políticas», incluidas las concentraciones ciudadanas. «Todos los medios de comunicación y publicaciones están bajo el control del mando de la ley marcial», ha dicho el general Park en un decreto que, según dijo, entró en vigor a las 11 p.m, hora local, ocho horas menos en España.
El edicto también impide las actividades laborales y la difusión de «noticias falsas». Quienes infrinjan el decreto pueden ser detenidos sin orden judicial.
Escándalos pendientes de investigar
El presidente surcoreano, cuya popularidad está en caída libre, está continuamente enfrentado al Parlamento, controlado por la oposición. Yoon asumió el cargo en 2022 con una victoria muy ajustada, de tan solo un 1% frente a su rival del Partido Democrático.
El principal partido de la oposición, el Partido Demócratico, con mayoría en el Parlamento, y el conservador Poder del Pueblo, de Yoon, están enfrentados por los presupuestos y por la demanda de una investigación sobre los escándalos en los que están implicados funcionarios leales a Yoon, así como su esposa.
El Partido Democrático ha pedido a todos sus legisladores que se reúnan en la Asamblea Nacional, según informa la agencia de noticias Yonhap, citada por The Guardian. Aunque la entrada en el Parlamento está bloqueada por las fuerzas del orden, los diputados están empezando a concentrarse en las inmediaciones de la Cámara. También hay manifestantes que se están enfrentando a las fuerzas de seguridad al grito de «fin a la ley marcial».
«El presidente Yoon declaró la ley marcial de emergencia sin motivo alguno», ha dicho el opositor Lee Jae-myung, que ha tachado la declaración de inconstitucional. «Tanques, vehículos blindados y soldados con pistolas y espadas pronto controlarán el país», ha añadido. «Es un momento desesperado. El destino del país está en juego», ha declarado Lee, que subraya que la ley marcial viola la voluntad del pueblo.
Unidades militares en alerta
Según la ley surcoreana, los legisladores no pueden ser detenidos y el gobierno tiene que levantarla si la mayoría de la asamblea nacional lo pide en una votación. El líder del partido conservador del propio primer ministro, Han Dong-hoon, rechaza la medida, así como Lee Jae-myung, líder del partido opositor. Según la CNN, 190 diputados se han reunido y han votado a favor de levantar la ley marcial.
Con la imposición de la ley marcial, todas las unidades militares del Sur, que sigue técnicamente en guerra con el Norte, han recibido la orden de reforzar sus posiciones de alerta y preparación ante emergencias. Este caos político es un escenario ideal para el enemigo del norte, aunque el presidente haya puesto de excusa su infiltración en el partido opositor.
La última vez que se declaró la ley marcial en Corea del Sur fue en 1979, tras el asesinato del entonces dictador surcoreano Park Chung-hee, que había tomado el poder en un golpe militar en 1961.