La Dirección Policial de Investigaciones (DPI) ha iniciado una rigurosa investigación tras la muerte de un bebé de nueve meses cuyo cuerpo fue entregado al personal de Medicina Forense la noche del sábado en la capital hondureña.
La madre del menor, procedente de la zona de la Montaña de la Flor, se presentó en la sede forense para entregar el cuerpo de su hija, un acto que levantó las alarmas de las autoridades,el cuerpo del bebé presentaba aparentes señas de golpes, lo que sugiere la posibilidad de un caso de maltrato o violencia.
La cronología de los hechos indica que la madre trasladó al bebé, envuelto en una sábana, hasta la vivienda de la abuela materna. Al percatarse de que el pequeño no reaccionaba, los parientes decidieron llevarlo de urgencia al Hospital Escuela. Una vez en el centro asistencial, los doctores confirmaron que el bebé ya no tenía signos vitales. Posteriormente, el cuerpo fue remitido a Medicina Forense para que se realizara la autopsia correspondiente que determine la causa oficial de la muerte.
La subinspectora de la Policía Nacional y portavoz de la DPI, Rita Obando, confirmó la intervención inmediata de la Dirección Policial de Investigaciones. Obando manifestó que el equipo de la DPI se presentó en Medicina Forense y está a la espera de los resultados de la autopsia para orientar la investigación. La portavoz indicó que ya se identificó a la madre y la abuela de la bebé y que ambas serán interrogadas en las próximas horas. Además, se realizarán diligencias adicionales como la indagación a vecinos y otras labores de seguimiento o vigilancia para esclarecer las circunstancias que rodearon el deceso del menor.
