Este martes, los hondureños Orbin Velásquez y Erick Raudales fueron extraditados a Estados Unidos por delitos relacionados con el narcotráfico, sumando así 53 extradiciones de connacionales a ese país hasta la fecha. En lo que va de 2024, Honduras ha extraditado a 13 ciudadanos por cargos similares.
Bajo un fuerte resguardo policial, ambos extraditados fueron trasladados desde la cárcel de Támara, donde se encontraban en prisión provisional, hasta la Base Aérea Soto Cano en Comayagua. Allí, una aeronave con agentes de la DEA se encargó de su traslado a Estados Unidos.
El operativo de extradición comenzó a primera hora de la mañana, con un amplio contingente de seguridad escoltando a los reclusos en su trayecto. Orbin Alfredo Velásquez Lavaire, conocido como Emerson, fue capturado por agentes de la Policía Nacional en El Porvenir, Francisco Morazán. Velásquez enfrenta cargos en la Corte del Distrito de Oregón, Estados Unidos, por la presunta distribución de fentanilo.
Por su parte, Erick Raudales fue arrestado en una zona montañosa del mismo municipio. Raudales está solicitado por la Corte de Denver, Colorado, por diversos cargos relacionados con el narcotráfico, incluidos distribución y posesión de fentanilo, metanfetaminas y cocaína.
El ministro de Seguridad, Gustavo Sánchez, ha destacado el esfuerzo de las autoridades en la lucha contra el narcotráfico, pero también es importante señalar que estos avances deben ir acompañados de una evaluación crítica del sistema de justicia y de las políticas de extradición para asegurar que se aborden adecuadamente los problemas subyacentes de la criminalidad y el narcotráfico en Honduras.
Además de Velásquez y Raudales, otras personas como Víctor Viera Chirinos, Mayer Banegas Medina, Elmer Bonilla Matute y Jorge Alberto Viera Chirinos también han sido extraditados a Estados Unidos por su involucramiento en el tráfico de fentanilo.