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Alumnos estudian en calamidad con el 69% de centros escolares de Honduras en precariedad

Además de no contar con material didáctico ni merienda escolar fija, casi 13,000 escuelas públicas de Honduras presentan daños en su infraestructura, llevándolas a un estado precario.

Los datos de la Secretaría de Educación, que contabilizan 12,743 escuelas dañadas hasta agosto de 2024.

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A través de la solicitud de información SOL-SDE-3876-2024, la Secretaría de Educación detalló que estas escuelas están identificadas con índices de precariedad en infraestructura.

“Es importante mencionar que la Secretaría de Educación, a través de la Dirección General de Construcciones Escolares y Bienes Inmuebles, ha logrado identificar 12,473 centros educativos con un índice de precariedad del 63% o menor. Esto quiere decir que, entre más bajo es el porcentaje, más crítica es la situación del centro educativo”, se explicó en la solicitud de información.

Juan Carlos Coello, director de Construcciones Escolares y Bienes Inmuebles de la Secretaría de Educación, contradijo los datos proporcionados a través de la solicitud SOL-SDE-3876-2024.

Explicó que “cuando la presidenta (Xiomara Castro) asumió, encontramos 12,743 escuelas destruidas. Hoy tenemos intervenidas 3,402 escuelas”.

Tomando en cuenta los señalamientos de Juan Carlos Coello, esto significa que 9,341 centros educativos estarían en condiciones precarias, aunque Educación no respondió formalmente a esta discrepancia en la solicitud de información.

Al consultar al director de Construcciones Escolares sobre el resto de los centros , manifestó que “arreglar escuelas no es de la noche a la mañana”.

Se le preguntó cuánto se ha invertido en los centros escolares intervenidos: “De 3 a 6 millones por centro educativo. Para reparar toda la infraestructura escolar del país se necesitan 40 mil millones de lempiras”.

No obstante, el viceministro de Educación, Edwin Hernández, aseguró que para intervenir los más de 12,000 centros educativos en estado de precariedad se necesita el desembolso de un préstamo que China otorgará.

“El préstamo es justamente para intervenir esos 12,000 centros educativos. El préstamo creo que es de 750 millones de dólares”, dijo Hernández.

Reconoció que estos centros educativos en precariedad no están “como se debe tener un centro educativo para honrar a los alumnos y para darles un espacio de calidad educativa”.

Al contratar estas cifras con datos de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) se constató que el sistema educativo hondureño cuenta con 17,358 inmuebles escolares que albergan 21,819 centros educativos públicos.

De estos, el 68% de los centros educativos son de nivel básico, el 30% prebásico y el 2% de nivel medio.

Por lo tanto, los 12,743 centros educativos en condiciones de precariedad equivalen aproximadamente al 69% del total de edificios escolares (considerando que la cantidad de centros es equivalente a la cantidad de edificios).

Departamentos más afectados

De acuerdo con los datos oficiales, Olancho es el departamento con más centros escolares afectados, con un total de 1,385.

Posteriormente, Francisco Morazán cuenta con 1,908 centros públicos en estado de precariedad, y El Paraíso suma 1,097. El resto de departamentos de Honduras, en promedio, tienen 400 centros educativos en mal estado.

Para el exministro de Educación Marlon Escoto, esto significa que “si la Secretaría de Educación informa que los 12,000 edificios escolares están bajo la condición de precariedad, se asume que al menos un 50% de los indicadores de precariedad se cumplen”.

“De acuerdo con lo anterior, la condición de precariedad de los edificios escolares mencionados es alarmante y requiere de intervenciones de emergencia que al menos intervengan el indicador con mayor influencia en el índice de precariedad”, agregó.

Marlon Escoto, director de Educación de la ASJ, externó la urgencia de una pronta intervención a los centros educativos, argumentando que “el aprendizaje se vuelve propicio en centros educativos con mejores infraestructuras, lo que conlleva a un mayor desempeño escolar”.

Agregó que “los edificios escolares en buenas condiciones contribuyen a la disminución del abandono escolar. La falta de edificios escolares adecuados es una de las principales causas de deserción, principalmente en zonas rurales”.

En la lista de factores que inciden en el aprendizaje de los escolares, la infraestructura escolar es el tercer factor, después de los docentes y los textos escolares, dijo Escoto.

 

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