La Comisión Permanente de Contingencias (COPECO) de Honduras extendió este viernes la Alerta Amarilla por 24 horas más para los departamentos de Valle, Choluteca y El Paraíso, debido a las fuertes lluvias que continúan azotando el país. Además, se sumaron a esta alerta los municipios aledaños al río Ulúa en Cortés y Yoro.
Según el informe de COPECO, la saturación de los suelos, combinada con las constantes precipitaciones, ha aumentado el riesgo de inundaciones, deslizamientos y crecidas de ríos en las zonas bajo alerta. Por ello, se recomienda a la población tomar las medidas preventivas necesarias y estar atentos a las indicaciones de las autoridades locales.
Los municipios que se incorporaron a la alerta amarilla son Pimienta, Villanueva, Potrerillos y San Manuel, en Cortés; y Santa Rita, El Progreso, El Negrito y hasta el Ramal del Tigre en Tela, Atlántida, debido al incremento en los niveles del río Ulúa.
Por otro lado, diez departamentos de Honduras se mantienen en alerta verde, lo que indica que se deben tomar precauciones ante la posibilidad de que las condiciones climáticas empeoren. Entre estos departamentos se encuentran Copán, Santa Bárbara, Ocotepeque, Lempira, Intibucá, La Paz, Comayagua, Francisco Morazán, Olancho y Gracias a Dios.
El Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (CENAOS) prevé que una vaguada en superficie sobre el país genere lluvias y chubascos de débiles a moderados en la mayor parte del territorio nacional, con mayor intensidad en las regiones occidental, sur y centro.
Ante esta situación, COPECO recomienda a las autoridades municipales fortalecer los sistemas de alerta temprana, realizar evacuaciones preventivas en caso de ser necesario y brindar asistencia a las poblaciones afectadas. A la población en general se le pide evitar cruzar ríos y quebradas, asegurar los techos de las viviendas y limpiar drenajes para evitar inundaciones.
Las autoridades hondureñas hacen un llamado a la población a mantenerse informada a través de los canales oficiales de COPECO y a seguir las recomendaciones de las autoridades locales para garantizar su seguridad.
Las fuertes lluvias y los fenómenos naturales son recurrentes en Honduras, especialmente durante la temporada lluviosa. Estos eventos suelen causar daños a infraestructuras, cultivos y viviendas, además de provocar desplazamientos de población.
