El sacerdote jesuita Ismael Moreno, conocido como el padre “Melo,” lanzó una crítica contundente contra la clase política de Honduras, señalando que el narcotráfico y la corrupción se han convertido en atributos de liderazgo. A través de su cuenta en la plataforma X, el padre Melo afirmó que los políticos vinculados a actividades ilícitas no solo evitan el desprestigio, sino que refuerzan su liderazgo al amparo de estas prácticas, calificándolo como un reflejo de la decadencia política.
Moreno señaló que en Honduras “no hay escándalo que asuste más de tres días”, sugiriendo que las denuncias de corrupción o nexos con el narcotráfico no impactan de forma duradera en la percepción pública. “Siempre será líder, más por narco, por corrupto o por vividor que por político. Es decadencia de la política”, expresó el sacerdote, enfatizando la falta de consecuencias que enfrentan los implicados en escándalos de alto perfil.
El padre Melo, un conocido defensor de los derechos humanos y crítico de la realidad nacional, también expresó su preocupación sobre las próximas elecciones en el país. Pese a la cercanía de un nuevo proceso electoral, Moreno advirtió que Honduras se dirige a las urnas sin reformas significativas que garanticen un sistema electoral más justo o democrático. “La democracia ha sido siempre observadora lejana en los procesos electorales”, afirmó, cuestionando la falta de mecanismos para que las elecciones favorezcan la democracia en lugar de consolidar el poder de las élites políticas.
Las declaraciones de Moreno encuentran eco en un contexto en el que diversos sectores de la sociedad hondureña exigen cambios estructurales y mayor transparencia en el sistema político. El país ha enfrentado numerosas denuncias que vinculan a figuras de la clase política con el narcotráfico y la corrupción, sin que estas acusaciones resulten en sanciones efectivas. La falta de reformas y el control de las candidaturas por parte de élites influyentes han sido señalados como obstáculos persistentes para el fortalecimiento de la democracia en Honduras.