Ascienden a 46 los fallecidos en los múltiples incendios que devastan el centro de Chile
Los fallecidos en los múltiples incendios registrados desde el viernes en la región de Valparaíso, a 100 kilómetros al este de Santiago, ascendieron a 46, informó este sábado el presidente chileno, Gabriel Boric, quien alertó de que el número de víctimas mortales «aumentará en las próximas horas».
«Tengo la confirmación de que hasta el momento se registran 40 personas fallecidas durante los incendios y 6 adicionales en recintos hospitalarios producto de las quemaduras (…) Dadas las condiciones de la tragedia, el número de víctimas de seguro aumentará durante las próximas horas», dijo Boric en una cadena nacional en el palacio presidencial La Moneda.
Se trata de la ola de incendios más mortífera de los últimos tiempos y casi duplica el balance de los fuegos del año pasado, que ya batieron récord de fallecidos con 27 muertes.
«Quiero reiterar el llamado de que, ante la indicación de evacuar, no lo duden. El fuego avanza muy rápido y las condiciones climáticas que hemos tenido han hecho mucho más complicado el combate a los incendios: altas temperaturas; vientos fuertes, promedio de 30 kilómetros por hora con rachas de hasta 60, y además baja humedad», indicó el mandatario.
Actualmente, hay al menos cuatro grandes incendios activos en la región de Valparaíso: dos en la ciudad costera de Viña del Mar (en los sectores de Las Tablas y Qurauma) y otros dos en las localidades de Quilpué (Villa Alemana) y Quillota.
Los devastadores incendios originados el viernes en los cerros densamente poblados que rodean la ciudad de Viña del Mar avanzan sin tregua y ya han alcanzado sectores industriales, donde se han registrado distintas explosiones en almacenes químicos, fábricas de pinturas y otras bodegas.
Las explosiones han generado una tóxica nube negra en la llamada «ciudad jardín», uno de los puntos más turísticos de Chile, que cada verano atrae a miles de veraneantes.
Para facilitar las labores de rescate y extinción de fuego y despejar las vías de evacuación, el Gobierno chileno ordenó un toque de queda de 12 horas, desde las 21:00 hora local (00:00 GMT) en los sectores que aún no han sido evacuados de las localidades de Quilpué, Villa Alemana, Limache y Viña del Mar.
«Nuestra prioridad es salvar vidas y para ello necesitamos disponer de toda la red de salud pública y privada», aseguró Boric, quien reconoció que hay sospechas de que el fuego sea intencionado.
«Sepan que se va a investigar hasta las últimas consecuencias y con todos los recursos necesarios», añadió.
Aunque Chile ha vivido uno de los inviernos más lluviosos de los últimos 15 años, los especialistas llevan meses alertando de que la sequía no se ha erradicado y de que existe una gran probabilidad de que se desarrolle vegetación fina y muerta en la zona centro-sur de fácil combustión. EFE/ir